“Panamá no será más un país de tránsito para los ilegales”: Mulino asume como presidente de Panamá

José Raúl Mulino juramentó como presidente de Panamá este lunes 1 de julio, convirtiéndose en el octavo mandatario en democracia desde el fin del régimen militar en 1989. La ceremonia contó con la presencia de dignatarios internacionales, incluyendo al rey de España, Felipe VI, y los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y Costa Rica, Rodrigo Chaves. Mulino prometió que “Panamá no será más un país de tránsito para los ilegales”.

Mulino, de 65 años, ganó las elecciones presidenciales el pasado mayo con el 34,23% de los votos, tras una campaña electoral accidentada. “Recibimos una economía seriamente afectada. No solo perdimos parcialmente el grado de inversión, también perdimos miles de empleos y la confianza de invertir en el país”, afirmó Mulino durante su discurso de investidura. Asimismo, criticó el estado de las finanzas públicas, señalando que en los últimos cinco años la deuda se duplicó, gran parte de ella gastada en funcionamiento en lugar de invertirla en obras para generar empleos.

Inicialmente candidato a vicepresidente en la fórmula del exmandatario Ricardo Martinelli, Mulino asumió la candidatura presidencial tras la inhabilitación y condena de Martinelli por corrupción. Desde su asilo en la Embajada de Nicaragua en Panamá, Martinelli ha solicitado apoyo para Mulino a través de redes sociales.

A pesar de su victoria presidencial, los resultados parlamentarios fueron más dispersos, lo que llevó a Mulino a reunirse con diversas bancadas de la nueva Asamblea, incluida la coalición independiente Vamos. Mulino también denunció la politización del sistema judicial, invitando a los funcionarios del poder judicial a rectificar fallos pasados.

Entre los principales desafíos que enfrenta Mulino se encuentran la falta de agua potable, irregularidades en el servicio eléctrico y la crisis en la Caja de Seguro Social (CSS). Además, Mulino anunció su intención de alcanzar un acuerdo con Estados Unidos para deportar a los migrantes que cruzan la peligrosa ruta del Tapón del Darién, una selva en la frontera con Colombia que se ha convertido en un centro de operaciones de organizaciones criminales internacionales.

Mulino subrayó que no permitirá que Panamá sea un camino abierto para miles de personas que ingresan ilegalmente al país, y expresó su deseo de firmar un acuerdo con Estados Unidos para iniciar procesos de repatriación de los migrantes acumulados en el Darién.

A la toma de posesión también asistieron mandatarios como el colombiano Gustavo Petro, el dominicano Luis Abinader y la hondureña Xiomara Castro, además de ministros de Asuntos Exteriores de varios países.